El mundo entero quedó impactado ante una mujer
desnuda que adornaba un edificio en Italia denunciando la Anorexia en su estado
más avanzado. El promotor, de esta inusual publicidad era el fotógrafo italianoOliviero Toscani, quien exponía
junto a la imagen una sola palabra “NO” e
intentaba hacer un llamado público, a través de los medios de comunicación para
que la sociedad se enfrente a la realidad de esta grave enfermedad que afecta a
miles de mujeres y niñas con secuelas de por vida en su salud física y mental,
incluso hasta el punto de llevarlas a la muerte.
Sin embargo, un par de días
bastaron para que nos invadiera una nueva imagen, solo que esta vez miles
mujeres 90- 60- 90 posaban en bikinis ante
los flashes destellantes que cubrían el espectáculo producido en una soleada
playa australiana en que la multitud era expuesta con el objetivo de conseguir
ingresar en el libro Guiness de los Records y así, convertirse en el grupo
femenino con esta vestimenta más numeroso fotografiado en el planeta.
La verdad, es que ambas noticias fueron motivo de
atención, aunque incongruentes en sus perspectivas del fin de la Imagen”, ya
que se opone el problema crítico de salud integral versus una moda estereotipo
de belleza femenina que no alcanza la talla 38 representando una delgadez
extrema. Por lo mismo, no deja de crear opinión y resulta evidente hasta la más
ciega de las miopías “la exposición del cuerpo de la mujer” dirigida a una masa
espectadora que la asume como un objeto y
más
grave aún, en una de las formas perversas de violencia sexista que atrapa a las mujeres en
una feminización de la anorexia fundada en un mito de la belleza física ideal y
en una búsqueda insaciable de la felicidad por complacer al otro aniquilando la
autoestima.
De esta manera, podemos observar que la problemática que
conlleva esta enfermedad no es tan efímera como el mero reflejo de una imagen
externa, sino que se traduce en una serie de consecuencias perjudiciales a la
salud, por lo que surgen las siguientes cuestiones:
¿Qué entendemos por Anorexia?
La palabra Anorexia procede
del griego y se puede interpretar como la negación o privación de lo apetecido,
en este caso “la comida”.
La anorexia es una enfermedad que lleva a un trastorno
en la conducta alimenticia y es provocada por la propia persona, por lo que no
es una conducta “natural” y supone una pérdida de peso que puede llevar a la
inanición.
Además,
esta enfermedad se caracteriza por un bajo peso corporal del normal (un 85%
menos) y una imagen distorsionada del cuerpo con un miedo constante a engordar.
¿Cómo se
origina?
El origen de la Anorexia no se atribuye a una
causa única y específica, pero como se concentra en la adolescencia es cuando
se debe colocar una mayor atención.
¿Qué características presenta la Anorexia?
La Anorexia se puede desencadenar frecuentemente en dos
tipos: (i) De tipo restrictivo que es, la restricción de la ingesta de
alimentos en especial los que sean ricos en grasas y carbohidratos y (ii) La
bulimia que es, comer excesivamente eliminando tal ingesta, a través el vómito
o con el consumo de laxantes.
¿A quienes afecta?
Principalmente, la Anorexia afecta las mujeres
focalizándose en el intervalo de adolescentes entre las edades de 16 y 18 años,
y con una incidencia en el mundo de 1/100 mujeres. Lo que, no significa que no
afecte a los varones cuyo porcentaje fluctúa de un 5 hasta un 10% Y
justamente, esta gran diferencia de las cifras justifica declarar como se
mencionó con anterioridad una feminización de la enfermedad.
¿Cuáles son sus consecuencias?
·
Falta de
grasa corporal necesaria para mantener sus órganos vitales sanos: corazón;
hígado y; riñones.
·
Baja en la
presión sanguínea, el pulso y el ritmo respiratorio.
·
Desaparición
de la menstruación.
·
Mareos y
falta de concentración.
·
Afecciones
comunes como: anemia; hinchazón de articulaciones y; fragilidad ósea.
·
Caída del
cabello, uñas quebradizas y que la piel se recubra de un vello fino y suave
llamado “lanugo”.
·
Dolor
estomacal y caída de dientes por el vómito constante cuando es bulimia.
·
Problemas
emocionales.
·
Aislamiento
social
·
Y lo más
peligroso de los trastornos alimenticios es que pueden desembocar en una
desnutrición severa y hasta provocar la muerte.
¿Tiene tratamiento?
Si!
El tratamiento de esta enfermedad se resuelve de forma
conjunta con especialistas de las áreas: clínica; psicológica o psiquiatra y
dietética debido a la relación de afección cuerpo/mente y es fundamental, la
participación activa de las personas más cercanas (familia, amistades, escuela,
comunidad, etc.) en una relación que nos concierne a todas y todos.
En Definitiva…
Retomando
lo planteado en un inicio respecto a la capacidad del impacto de los medios de
comunicación en cuanto a su influencia y poder de imponer la información, tanto
para producir conciencia social de la enfermedad que come a la gente o con el
propósito de vender un modelo de mujer sin escrúpulos que puede acarrear
contraer la anorexia. Sin lugar a dudas, es posible presumir que estas situaciones
contrapuestas están vinculadas directamente a los valores, las creencias y las
actitudes comunes del grupo, a las que se les da respuesta y reesfuerza, lo que
no quiere decir que los medios queden liberados de responsabilidades, pues el
esfuerzo de sus acciones son recompensadas económicamente y es una actitud muy
cómoda que enraíza el individualismo de las sociedades modernas y desarrolladas.
El llamado es a dar un vuelco del culto al “Vacío”, en
que se intenta establecer un parámetro del cuerpo femenino, como un objeto
subordinado que se vende en el mercado por la mano invisible de los intereses
de quienes manejan los medios de comunicación sacrificando la salud de las
personas, por lo que hay que asumir que nos corresponde y actuar con un
compromiso real ante esta problemática mundial.
Daniela
Andrade Zubia
https://docs.google.com/Doc?id=dggvxhqd_311pm676b
imágenes Google.