CUIDADO CON SER UNA: MUJER QUE AMA DEMASIADO !!!

Seguramente muchas veces han oido del tema y de los muchos libros de auto-ayuda para las mujeres que aman demasiado, y por supuesto no me estoy refiriendo del amor que sienten hacia  sus hijos, sus gatos, sus padres, sino a sus parejas.Sí sus parejas, sus medias naranjas, sus enamorados, novios,esposos, amantes, convivientes, padres de sus hijos etc. Personalmente, no me parece mal amar demasiado, siempre y cuando te amen igual, obviamente, como se imaginarán y ya que hemos nombrado la palabra autoayuda, en este caso nos refererimos a los casos en que las mujeres son víctimas del amor.
Amar no es sinónimo de sufrir. !!!

PORQUÉ UNA MUJER SE PUEDE CONVERTIR EN UNA VÍCTIMA DEL AMOR:
Presta MUCHA atención a estos puntos, por favor!!

1.  Quizá haya tenido experiencias en la niñez particularmente dolorosas.
2.  Un hogar muy mal constituído.
3.  Padres despreocupados sin capacidad de dar amor y protección.
4.  Teme al abandono, por lo que evita que cualquier relación se disuelva.
5. Es capaz de cualquier cosa por ayudar al hombre que ama.
6. Debido a la falta de amor, se esfuerza en exceso por complacer a su pareja.
7. Está dispuesta a aceptar más responsabilidades, culpas y reproches que su pareja.
8. Posee poco amor propio y cree que no merece nada.
9. Por su inseguridad, necesita desesperadamente controlar a su pareja y su relación.
10. Sueñan con una relación fantasiosa que no es verdadera.
11. Es adicta a los hombres y al sufrimiento.
12. Tiene predisposición a las adicciones.
13. Evade su responsabilidad para consigo, al sentirse atraída por personas conflictivas, caóticas o emocionalmente dolorosas.
14. Puede ser propensa a depresiones, las cuales disfraza con la excitación que le brinda una relación inestable.
15. Considera aburridos a los hombres amables y confiados que se interesan en usted.

Algunas mujeres se ven frecuentemente impulsadas, de forma inconsciente a recrear situaciones similares durante toda la vida, esto en un impulso de lograr el control sobre ellas.

Si por ejemplo, nosotras de pequeñas quisimos mucho a un padre que no nos hacía el menor caso y no correspondía nuestra necesidad de amor y protección de hijas, entonces probablemente, en la edad adulta, nos enamoremos de alguien silmilar a "ese padre" en un intento de ganar ese amor por el que "rogábamos" de pequeñas.

Las mujeres que aman demasiado, pueden recuperarse cuando descruben la capacidad de amarse a sí mismas.

CÓMO HACER PARA MEJORAR:

Según la reconocida terapeuta familiar Robin Norwood, los pasos para lograrlo son sencillos pero no tan fáciles:

1. Busque ayuda, haciendo que la recuperación sea la primera prioridad de su vida.
2. Busque un grupo de apoyo formado por pares, que la escuchen y entiendan.
3. Desarrolle su lado espiritual.
4. Deje de controlar a los demás.
5. Enfrente con coraje sus propios defectos y problemas.
6. Cultive lo que necesite desarrollar en usted misma.
7. Vuélvase egoísta.
8. Comparta con otros lo que ha experimentado y aprendido.    

Según Norwood, Hay que comenzar a trabajar en esto cuando notamos que:

Cuando estar enamorado significa sufrir, es que estamos amando demasiado. Cuando la mayoría de nuestras conversaciones con amigas íntimas son acerca de él, de sus problemas, ideas, acciones y sentimientos, es que estamos amando demasiado. Cuando disculpamos su mal humor, su indiferencia y sus desaires e intentamos 

                                                                              Imágenes de Google

 Ayuda Bibliográfica de:
      http://www.psicologosperu.com/
      http://www.lecturalia.com 

Recuerden: EL AMOR no se compra, no se firma, no se ruega, ante todo el AMOR es RESPETO y es DAR Y RECIBIR POR IGUAL, quien no te quiere, pues NO TE MERECE!! y NADIE PUEDE AMARTE como TU MISMA!!!
Regina.

Y a propósito, se me vino a la mente un poema de Borges que me encanta que dice:

Después de un tiempo
uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano
y encadenar un alma
(...)
que besos no son contratos
y los regalos no son promesas.
Y uno empieza a aceptar sus
                              /derrotas
con la cabeza alta y los ojos
abiertos.
                          Jorge Luis Borges.